¡Ya está aquí la Navidad del 2020! Un año peculiar, pero que, al menos, como todos, merece una conclusión memorable.

Los escaparates de Turris lucen estos días decorados con ilustraciones únicas, hechas a mano, y con una finalidad concreta: devolver a las calles la calidez típica de estas fechas.

Las calles de Barcelona se van llenando de gente, de todas las edades y con circunstancias muy diversas. Las medidas de prevención de la Covid-19 respecto al aforo los establecimientos han hecho que, en horas puntuales del día, vivamos un fenómeno ya bien conocido: las colas en la calle. Para los clientes y clientas que espere cada día a la puerta, decidiendo qué llevaros de postre o bien qué pan os apetece más, seguramente será una encantadora novedad.

El proyecto artístico de este año nace con la intención de acompañar a nuestros clientes mientras hacen cola, pero no sólo eso, lo que pretende conseguir va mucho más allá.

El artista visual que lidera el proyecto de los escaparates, Julia Mata Riera, tiene como meta ‘transmitir la calidez de ese momento de encuentro y representar lo que, para muchos, es más importante de la Navidad: una festividad para compartir y celebrar la vida con las personas queridas’. Es gracias a ella que tenemos los escaparates tan bonitos, y nos explicó algunas claves de su trabajo: el arte visual. 

La persona tras las ilustraciones  

Tras las ilustraciones de nuestros escaparates, ahora mismo, físicamente está el obrador, pero no nos referimos a esto.

Tras toda pieza artística, está el espíritu de quien la ha creado, y este se completará generando sensaciones muy diversas a su público. Haciendo sonreír, disfrutar, y también soñar y recordar momentos vividos.

Julia, artista visual encargada de los escaparates de Turris, nos regala un pedazo de su tiempo, para explicarnos los senderos que debe recorrer hasta obtener el resultado ideal.

Para crear los escaparates de Turris se tiene en cuenta el mensaje que se quiere comunicar y los productos del establecimiento, y se crea una intención y un sentimiento a transmitir al cliente. Además, cada objeto o elemento decorativo se trabaja a mano, al igual que cada producto Turris es un producto artesanal.

La particularidad del arte en los obradores  

El pan es un producto natural y de elaboración artesanal. Se hace un uso generalizado entre la población, donde confluyen múltiples aspectos culturales. Es por ello que un obrador artesanal es un lugar óptimo para compartir comerlo.

'A mí me favorece a la hora de conceptualizar y relacionar ideas', nos asegura Julia, y añade: 'El pan es también un producto del día a día. Ir a comprar el pan es un acto que muchas personas han integrado en su vida cotidiana. En este sentido, me gusta ofrecerles un espacio acogedor y lleno de sorpresas’.

¿Cómo surgió la idea los escaparates de esta Navidad?  

Es evidente que este año viviremos una Navidad especialmente sensible, porque ya vivimos una realidad que lo es. Los artistas insisten en la importancia de preservar la cultura, de utilizarla y explotarla para mejorar el estado de ánimo de las personas: Al ver las colas de gente separada y el tiempo que hace que no nos podemos encontrar y compartir, pensé que sería bonito recordar los momentos de contacto, la ternura y la alegría de celebrar y compartirnos.

Sin embargo, este año la Navidad se deberá celebrar desde casa, y deberá ser en grupos reducidos. Es por ello que en Turris, como muy bien decía Julia, hemos querido poner nuestro granito de arena y hacer respirar el espíritu navideño, la familiaridad y la calidez, a nuestros obradores.  

La historia y el porqué de los personajes  

Encontraréis niños, adultos, deseos, abrazos ... Hay un diálogo sutil de miradas entre las diversas personas de diferentes generaciones. Pretendo representar la solidaridad y la hermandad entre las personas , y sobre todo un pequeño homenaje a los grupos más vulnerables: los niños y los ancianos.

En los escaparates hay reflejados desde niños hasta estampas familiares, todas ellas con gran capacidad de transportarnos a momentos vividos, y sensaciones muy diversas según la realidad de cada uno.

Seguro que, los escaparates de este año no pasan desapercibidos. Te animamos a acercarte, en el obrador Turris de tu barrio, pero también a los demás, descubriendo el hilo que liga cada creación y cada escaparate, en un mismo concepto.

La Julia nos ha acercado al proceso creativo que hay detrás de cualquier proyecto artístico, mucho más complejo que sólo 'dibujar' o 'diseñar', y estamos enormemente agradecidos y agradecidas. Deseamos que os transmitan las mismas buenas sensaciones que nosotros cuando cada mañana elaboramos nuestros productos. Arte visual en los escaparates para deslumbrar las calles con imágenes agradables, sensibles y reconfortantes; acompañando a los clientes y clientas, ya todas las personas que se acerquen a hacerles un vistazo En un año en el que, tal vez más que nunca, hay que reavivar el espíritu navideño de los que aún no la hayan encontrado, y reforzar la ilusión de quienes viven estos días con toda el alma.