Desde el pasado 19 de septiembre todos estamos consternados ante la erupción volcánica ocurrida en la Isla de La Palma. Los primeros momentos fueron inesperados para los vecinos, su volcán volvía a rugir con fuerza después de 50 años durmiendo. Todo el mundo tenía que desalojar sus hogares sin ni siquiera poder recoger sus objetos personales.

La lava del volcán Cumbre Vieja empezaba a deslizarse destruyendo a su paso edificaciones, plantaciones, colegios... Un desastre natural con consecuencias catastróficas que hizo desalojar de su vivienda a miles de personas.

 

La solidaridad es cosa de todos

Más de 6.000 personas han perdido sus casas y sus recuerdos más queridos después de la erupción del volcán Cumbre Vieja. Pero en contraposición a este río de destrucción, ha nacido un río de solidaridad llegado de todo el mundo. La sociedad, las instituciones y centenares de empresas, han creado una oleada de solidaridad para ayudar los vecinos afectados que, en muchos casos, lo han perdido todo. El objetivo de este aluvión de solidaridad es proporcionar apoyo económico y psicológico a las personas evacuadas en albergues, polideportivos, casas de amigos, etc.

 

Turris se une en este río de solidaridad

Desde Turris, nos gusta colaborar con las iniciativas que hacen bien a nuestra sociedad y que ayudan a las personas que lo necesitan. Por eso, queremos aportar nuestro granito de arena, y unirnos a todas las iniciativas solidarias que han surgido alrededor de esta catástrofe. En estas fechas, donde la gente se reúne con los suyos en los hogares de unos y otros, todavía es más importante la cooperación de todos para que todo el mundo tenga momentos especiales llenos de amor.

Como ya es tradición en Turris, cada Navidad puedes probar un dulce navideño y, a la vez, colaborar con una causa solidaria gracias a nuestros “arbolitos solidarios”. De chocolate y de frutos secos, estos arbolitos solidarios son ideales para un desayuno en casa, o para merendar con los tuyos. Por eso, acércate a tu obrador del barrio y compra un arbolito solidario, porque no hay una manera más dulce de participar en esta acción que regalarle uno a tus amigos y familiares. Y ¡además está buenísimo! Gracias a este pequeño gesto los vecinos de la Isla de La Palma recibirán 0,50€ por cada uno de ellos. Regala solidaridad con la ternura de estos arbolitos solidarios.

Pero, en Turris, los arbolitos de Navidad no han sido los primeros que han ayudado a los vecinos de La Palma. Todo comenzó con las “palmeras solidarias”, gracias a las cuales destinamos el 25% de su venta para ayudar a los vecinos afectados. Esta campaña fue todo un éxito, aun así no finalizó aquí nuestra colaboración. Estábamos seguros de que podíamos hacer más para ayudarlos. Por eso, los beneficios de los “talleres solidarios” que realizamos se están donando íntegramente desde el pasado septiembre, y continuaremos aportando los beneficios a lo largo del año 2022.

Hasta ahora, con la iniciativa de las palmeras solidarias y los talleres solidarios que hemos llevado a cabo hasta ahora, llevamos recaudados más de 6.700€, sin embargo, estamos seguros de que esta Navidad, con la colaboración de todos, conseguiremos aportar mucho más a los vecinos de la Isla de La Palma. Creemos que ante tanta tristeza, estas ayudas suponen una inyección de esperanza para los vecinos afectados, ya que de este modo notan que no están solos y que a pesar de la distancia, estamos con ellos.

 

¿Dónde van nuestras donaciones?

En un año en que más que nunca hay que reforzar el espíritu navideño de aquellos que sufren, y aumentar su ilusión, en Turris hemos pensado que la mejor forma de ayudar y de llegar a todo el mundo es dando la recaudación a los ayuntamientos de “Los Llanos de Aridane”, “El Paso”, y al “Cabildo Insular de la Palma”.

Os animamos a colaborar y a implicaros con los otros, y como ya es tradición, sed solidarios y ¡no os quedéis sin vuestros arbolitos!

 

En Turris animamos a todo el mundo a colaborar activamente, porque como dijo Eduardo Galeano: “mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo causas pequeñas, puede cambiar el mundo”.